El presidente Trump ha tomado un segundo aire en su mandato presidencial al anunciar aranceles contra México y la postulación para su segundo mandato presidencial. En México, se encienden las alarmas por la caída inminente del peso.
Por César J.G.
Luego de que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunciara el pasado jueves 30 la imposición de una carga arancelaria del 5 por ciento para todos los productos mexicanos que sean exportados a su país, el subsecretario de Relaciones Exteriores, Jesús Seade, indicó en conferencia de prensa que la diplomacia mexicana respondería de «manera enérgica» a dicho gravamen.
La alarma en México se encendió debido a que el magnate amenazó con elevar los impuestos progresivamente si no se atendía «el flujo de migrantes ilegales que pasan por México», iniciando el próximo 10 de junio con 5 por ciento; 10 al llegar al primero de julio; 15 hacia el primero de agosto; 20 al primer día de septiembre y 25 por ciento al llegar al primero de octubre.
Esta ofensiva en términos económicos llegó en un contexto desafortunado, como «una ducha helada», dijo Seade. Y es que AMLO solicitó al Senado aprobar un periodo extraordinario para ratificar el Tratado México-Estados Unidos-Canadá, hecho que empresarios de los distintos sectores habían celebrado.
La imposición de aranceles, destacó Jesús Seade, podría llevar a una guerra comercial entre ambos países. Además, calificó esta medida como «muy extrema». En tanto, horas más tarde el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer a través de Twitter una carta dirigida al mandatario estadounidense.
El intercambio AMLO – Trump
En ella, López Obrador insistió no querer «la confrontación». Además, recordó las relaciones diplomáticas celebradas entre Benito Juárez y Abraham Lincoln; así como entre Lázaro Cárdenas y Franklin D. Roosevelt, de quien destacó su entendimiento en torno a la expropiación petrolera llevada a cabo en 1938.
Sobre Roosevelt, hizo hincapié en que «Antes que nadie proclamó los cuatro derechos fundamentales del hombre: el derecho a la libertad de palabra; el derecho a la libertad de cultos; el derecho a vivir libre de temores; y el derecho a vivir libres de miserias». Además, aseguró que es bajo este principio que ha buscado, en repetidas ocasiones, cooperar para lograr el desarrollo de la región de Centroamérica.
Sin embargo, en una parte crítica de la misiva, la Presidencia reprocha que el Gobierno estadounidense quiera solucionar problemas sociales con impuestos. «La Estatua de la Libertad no es un símbolo vacío», se puede leer. De igual manera, se critica la frase de campaña de Trump, misma que ha sido duramente criticada hasta la fecha y usada constantemente por sus seguidores en todo evento en el que se busque enaltecer su nacionalismo.
«El lema “Estados Unidos primero” es una falacia porque hasta el fin de los tiempos, incluso, por encima de las fronteras nacionales, prevalecerán la justicia y la fraternidad universales». Ante ello, propone Obrador, se deben buscar alternativas de solución, la política «se inventó para evitar la confrontación y la guerra». Para finalizar, solicita preparar a funcionarios de su gabinete para celebrar una reunión con la parte mexicana y así, buscar un acuerdo en benéfico de ambas naciones.
No obstante, la reacción estadounidense llegó temprano el viernes, cuando vía redes sociales Donald Trump acusó a México de aprovecharse a su país y no hacer nada a pesar de que se «puede solucionar el problema (de la migración) fácilmente». En un segundo mensaje, recalca que los aranceles fueron impuestos para «detener las drogas y a los ilegales».
Asegura además, que el 90 por ciento de las drogas que hay en su país entran por México, hecho que ha provocado que 80 mil personas murieran el año pasado y que un millón quedaran «en las ruinas». Por último dice, «tenemos un déficit comercial de 100 mil millones de dólares con México».
Los antecedentes arancelarios
Donald Trump inició una guerra arancelaria en contra de distintos países, incluyendo China: gigante económico mundial que, en un inicio, respondió medianamente a estas hostilidades, pero que ahora no tiene otra salida más que la negociación.
La diplomacia estadounidense plantea también una hegemonía en cada conversación que sostiene con sus homólogos de otros países. Para ejemplo de ello, la segunda cancelación del encuentro entre Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, por parte de Mike Pompeo, secretario de Estado de Estados Unidos, cuya reunión estaba prevista para realizarse el pasado 23 de mayo.
La poca comunicación entre ambos gobiernos ha permitido que medidas arancelarias se impongan como diálogo, y es que ya el año pasado, el 31 de mayo, Estados Unidos impuso impuestos a las importaciones de acero por un 25 por ciento y de 10 por ciento en aluminio. Si bien nuestro país no fue el único al cual le fueron implementadas estas medidas, sí fue uno de los más golpeados.
Tan solo en agosto de 2018, el valor de las exportaciones mexicanas bajó 12 por ciento respecto al mismo mes pero de 2017. Previo a la imposición de este gravamen, la cifra tuvo un crecimiento exponencial de hasta 36 por ciento, igualmente, respecto al año anterior.
Si bien este impuesto fue cancelado recientemente, otros productos mexicanos fueron colocados en la lista de aranceles, tal es el caso del jitomate, al cual se le cobrarán 17.5 por ciento para que su entrada a EUA sea permitida, hecho que podría mermar la producción ya que de acuerdo con las autoridades mexicanas, muchos campesinos no cuentan con la suma monetaria necesaria para mantener el gravamen.
Hasta ahora el objetivo del Gobierno mexicano se ha enfocado de crear estrategias que permitan que la migración en Centroamérica cese, es por ello que lanzaron el pasado 20 de mayo un Plan de Desarrollo para México y Centroamérica, el cual tiene como fundamento la inversión para la generación no solo de crecimiento económico, sino también de bienestar social.
Otra estrategia planteada por López Obrador es modificar el destino de los recursos de la Iniciativa Mérida, medida adoptada por el expresidente Felipe Calderón Hinojosa y el expresidente de EUA Barack Obama para coadyuvar en el combate al crimen organizado.
Este es hasta ahora el primer gran descontento con México por parte del Gobierno estadounidense, por lo que se espera pueda tener una solución antes de que los impuestos incrementen nuevamente, hecho que sin duda repercutirá en la economía mexicana. Hasta ahora, tras el anuncio de Tump, el peso perdió de golpe 1.38 por ciento frente al dólar.
En medio de esta incertidumbre financiera, Donald Trump anunció que dará a conocer su intención por competir en las elecciones para su segundo mandato el próximo 18 de junio, en compañía de Mike y Karen Pence, así como de su esposa Melania.